Técnicas para enseñar a hablar a tu loro.
Los loros tienden a imitar el habla humana principalmente por su necesidad de sociabilizar.
Lo mas fácil es enseñarle a decir su nombre ya que es lo que más le repetiremos, debemos escoger un nombre fácil a poder ser de dos silabas.
La mejor manera de enseñarle su nombre es repitiendo “Hola seguido de su nombre” por ejemplo “Hola Yaqui” cada vez que entremos en la estancia donde tengamos ubicado al loro o cada vez que queremos llamar su atención o dirigirnos a él.
Cuando estemos en el proceso de aprendizaje debemos tener al loro lo menos distraído posible, evitaremos que en la habitación hayan componentes de distracción por ejemplo un gato o un perro, si lo que queremos es enseñarle una frase en concreto.
Debemos enseñarle una palabra detrás de otra, es decir, si nuestro objetivo es que diga “Hola” debemos de repetírsela una y otra vez a poder ser con la misma entonación, cada vez que haya repetido la palabra que queremos debemos de premiarlo por ejemplo con una pipa de entrenamiento (pipa negra)
Las sesiones de aprendizaje deben durar entre 10 y 15 minutos varias veces al día, cuando el loro este bien despierto, a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde.
No debemos enseñarle una nueva palabra hasta que la primera no la diga clara, ya que si no lo único que conseguiremos es liarle.
Cuando ya haya aprendido una palabra ya podemos iniciar el aprendizaje de la segunda por ejemplo “Guapo”. Si durante el aprendizaje de la segunda palabra nos repite la primera no debemos premiarle, debemos hacerle saber que la hemos oído diciéndole “muy bien” pero no mediante un premio “físico”, es decir una pipa.
Solo debemos premiarle cuando repita la palabra que en cuestión le estamos enseñando.
Siempre debemos recordarle palabras aprendidas repitiéndoselas cada día.
Los loros tienen gran capacidad para imitar silbidos, podemos enseñarle una melodía silbada a base de repetición.
Debido a su gran capacidad de imitación muchas veces nuestro loro aprenderá sonidos que no queremos que aprenda por ejemplo “timbre de la puerta”, “timbre del teléfono”. Es difícil eliminar estas conductas pero en algunos casos ignorando al loro cuando reproduzca estos sonidos puede ayudar a que el loro deje de imitarlos.